Bienvenido a la "Casa del desierto"

Špela Videčnik, arquitecta de OFIS Architecture, experta en entornos extremos y profesora invitada de la Universidad de Harvard, dirigió el amplio y experimentado equipo de arquitectos responsables de "la casa del desierto", el ambicioso proyecto de Guardian Glass en el desierto de Goraffe, España. Ahora habla de los retos y objetivos que el equipo tenía con el proyecto.

P - Desde el punto de vista arquitectónico, ¿cuál es el principal objetivo que se plantea un arquitecto a la hora de ejecutar un proyecto complejo como este?

Hay muchos problemas. Lo más importante es conseguir el mejor rendimiento del edificio en condiciones extremas, manteniendo la mejor relación entre el interior y la bella naturaleza. Es importante mantener las vistas abiertas y establecer un contacto entre el habitante y el entorno. Por otro lado, también hay que tener en cuenta la resistencia estructural contra el fuerte viento y todas las fuerzas verticales y, por supuesto, las características térmicas del edificio que deben funcionar muy bien en el clima extremo de esta región.

P - Cuando Guardian Glass la retó con este proyecto, ¿cuál fue su primer pensamiento, su primera sensación? ¿Le pareció viable?

Nos despertó el interés. En la oficina, por supuesto que nos ocupamos de proyectos muy duros, pero yo diría que lo que nos gusta mucho es fabricar pequeños objetos como este en entornos extremos. En los últimos años construimos tres refugios alpinos en montañas muy altas, con mucha nieve, y estamos probando su resistencia y el bienestar de los montañeros que los usan. La casa de cristal en el desierto forma parte de esta investigación, pero desafía un contexto, un clima y un material muy diferentes.

P - Dado que son ustedes arquitectos especializados en entornos difíciles, ¿cuáles son los principales requisitos que deben cumplir estas construcciones para ser habitables y cómodas? ¿Qué es lo más importante que se debe tener en cuenta?

En primer lugar, es un problema climático. Gorafe tiene veranos muy calurosos, casi sin lluvias, con sol y vientos fuertes... y luego en invierno puede hacer mucho frío e incluso nevar. También hay diferencias de temperaturas extremas entre el día y la noche que tuvimos que considerar. El edificio debe hacer frente a este clima y proteger el interior del sol y al mismo tiempo mantener el vidrio lo más transparente posible. Lo conseguimos con la ayuda de los expertos de Guardian, que definieron varias capas en el triple acristalamiento, que no son visibles pero que consiguen un aislamiento térmico del interior. También exploramos el aspecto estructural del vidrio: tener paredes de vidrio también como elemento estructural. En este edificio no hay columnas ni de acero ni de madera. El tejado, con todos sus pesados elementos fotovoltaicos, solo se apoya en el vidrio.

P - Además, "La casa del desierto" es un edificio energéticamente eficiente y autosuficiente, de consumo casi nulo. ¿Qué papel juega el vidrio en esto?

El vidrio juega un papel importante en este edificio. En nuestros proyectos nos gusta investigar y probar diferentes tipos de materiales. El vidrio es el héroe de nuestro proyecto y disfrutamos desafiándolo hasta sus límites. Crear una casa de cristal es jugar con las transparencias y los reflejos... Luego se trata de probar su característica térmica, para evitar que el interior se caliente demasiado en verano y mantener el calor interior en invierno. El tercer reto fue crear un edificio sin otra estructura que el cristal. Sin columnas ni acero, transparencia pura.