El proyecto lo inició el despacho OFIS Architects en Liubliana (Eslovenia) para ayudar a investigar el impacto de las condiciones climáticas extremas en diferentes tipos de materiales y técnicas de construcción. El moderno refugio se diseñó en el otoño de 2015 en el estudio "Habitation in Extreme Environments" (Residencia en entornos extremos) de la Escuela de postgrado de diseño de Harvard.
La propuesta de Katie McDonald, Erin Pellegrino y Frederick Kim se seleccionó de entre una serie de diseños que presentaron los estudiantes de arquitectura y, posteriormente, se desarrolló. La construcción totalmente terminada se sitúa ahora en lo alto de la montaña Skuta, en los Alpes eslovenos, donde las condiciones climáticas son extremas y duras. Uno de los requisitos del proyecto era que el refugio necesitaba proporcionar un entorno seguro y confortable para hasta ocho personas.
Para el ventanaje seleccionaron a Guardian Glass como principal colaborador, ya que la empresa se encuentra entre los proveedores de vidrio con más experiencia y mejor cualificados técnicamente del mundo.
Las principales ventajas del vidrio son su aspecto neutral, gracias al cual el refugio se integra al máximo con la naturaleza que lo rodea, la baja reflexión exterior, para obtener la mejor visión posible, y la baja reflexión interior, que permite a los ocupantes disfrutar de las vistas del entorno tanto de día como de noche.